28 dic 2022

LA BOCA: RECOMENDABLE INCLASIFICABLE

 San Fernando, 39


 










 

La calle San Fernando, más popularmente conocida “calle La Feria”, se ha convertido al caer la noche en una vía intimista, donde la luz de las farolas parece cada día más tenue al ocultarse entre los naranjos. En unión con el momento y ese ambiente romántico, apenas sobresale la imagen del letrero luminoso del restaurante LA BOCA, nuestro destino sibarita en esta ocasión.

No vamos a decir incontables, pero si fueron muchos los intentos por conseguir mesa  en los últimos años hasta que definitivamente nos lo tomamos en serio e hicimos por reservar. No es que sea imposible, pero quizás siempre lo intentamos sin esa reserva previa y en malas fechas: sábados noche, en puentes festivos o periodos vacacionales destacados en la ciudad. Así, ya os decimos que va a estar complicado, de modo que una llamada para guardar una mesa a nuestro nombre siempre será la mejor opción para evitar decepciones.

Desde que entramos descubrimos un lugar de difícil etiquetaje en lo estético. Mezcla de reciclaje, uso de lo vintage y de detalles simpáticos, guarda también esa pátina de colores discretos y de iluminación tenue que lo une al entorno. Comparte vida en común con “Un perro Andaluz”, la taberna anexa a la que se llega cruzando un patio. La carta de uno vale en el otro y la del otro en el uno, lo que le convierte literalmente en un establecimiento "dos en uno".

Interior de La Boca

A nuestra llegada el recibimiento es en todo amable y cercano. Nos conducen hasta el fondo del local donde podemos elegir entre varias mesas. Nada más tomar asiento nos dejan una botella de agua del grifo y unas aceitunas.


Venimos decididos a acompañar nuestra cena con vino y hay reconocer que al contarnos que trabajan tintos y blancos cordobeses, más allá de los habituales generosos de la D.O. Montilla-Morilles, toda nuestra atención la pusimos en estos vinos y ni siquiera preguntamos si disponen de más bodega. Pudimos catar, antes de elegir, entre dos blancos y dos tintos de la Bodega Marenas, donde su responsable, José Miguel Márquez, produce vinos naturales en la Campiña cordobesa.


Nos alegra encontrar vinos de la tierra creados con personalidad y con la peculiaridad de tratarse de vinos sin filtrar y sin aditivos. Nos decantamos por una copa de blanco "Matapalos" -Pedro Ximenez- y una de tinto "Cerro Encinas" -Monastrell-. Referencias realmente interesantes.






Las posibilidades de elección de platos son aparentemente limitadas si nos fijamos en la carta de La Boca. Una selección de platos difícil de etiquetar, aunque predominan las elaboraciones e ingredientes de origen oriental. Decíamos que las posibilidades eran limitadas aparentemente porque en la realidad se compensa con creces teniendo en cuenta que es posible pedir cualquier plato de la carta de El Perro Andaluz, taberna hermana, donde prácticamente es posible encontrar de todo: desde tacos a bocadillos, pasando por hamburguesas e incluso sopas.

 

 Carta de "La Boca"

 

Carta de "El Perro Andaluz"

 

Entre esta mezcolanza, nos decimos por platos, todos, de la carta de La Boca. Comenzamos con un par de croquetas, pero no las de pescado de la carta al no estar disponibles. Como alternativa disponen de croquetas, en este caso, de gallina. De tamaño generoso, cremosas y acompañadas de germinados y mahonesa de toque picante fueron un entrante más que recomendable.

"Croquetas de gallina" de La Boca

 

Compartimos, también, un par de platos principales. En primer lugar, el “Bacalao con costra de pesto rojo y crema de patata”. El bacalao necesita siempre un complemento de sabor y la pasta de pesto rojo -derivado del tradicional verde al que se añade tomate seco- descubrimos que funciona perfectamente. Buen punto también de la pieza de pescado que se acompaña de una crema de patatas a modo de cama y unas finas migas.

"Bacalao con costra" de La Boca

 

Continuamos con la “Carrillera Ibérica en brick, curry verde y arroz basmati”. Una forma poco corriente de encontrar la carrillera y nada agraciada en lo estético que sin embargo funciona bien en cuanto al sabor. Algo blanda la mezcla por el baño de curry que, en cualquier caso, está para mojar.

 "Carrillera Ibérica" de La Boca

Finalizamos velada con un "Brownie de chocolate blanco". Templado y dulce postre compensado con un par de bolas de helado. Sin matices, nos encantó.

 "Browney de chocolate blanco" de La Boca

La cuenta ascendió a 52,7 euros. La relación calidad-precio creemos es francamente buena. Tened en cuenta que veníamos en pareja y que la valoración es realmente satisfactoria en lo gastronómico, ambiente y trato.

Dejamos La Boca y pasamos junto a las estancias que sirven de salas para El Perro Andaluz y que están a pie de calle. La bucólica imagen de una pareja cenando tras una reja en una de estas estancias se graba en nuestra memoria y sirve de perfecta despedida en una noche en la que hemos descubierto un lugar definitivamente muy recomendable.

Una despedida también perfecta para nuestro blog en 2022. ¡Felices fiestas y feliz entrada de año! Nos contamos más historias sibaritas en 2023.


 



No hay comentarios:

Publicar un comentario