Para quien no haya oído hablar
del lugar, probablemente le resulte agradablemente inesperado. Inesperado por
su presencia discreta frente a una experiencia que sorprende y por una
propuesta gastronómica que contrasta quizás con el espacio urbano que lo acoge.
Ese espacio urbano no es otro que San Lorenzo que pasa por ser uno de los
“barrios viejos” de la ciudad. No en vano, su origen se halla en las collaciones
creadas tras la conquista cristiana de la ciudad allá por el siglo XIII. Dentro
de su entramado viario se dispone una zona abierta a modo de pequeña placita –
inicio de la calle Arroyo de San Lorenzo y apenas a unos metros de la iglesia
que da nombre al barrio – cuyo único rincón acoge este lugar del que os venimos
hablando y donde esta vez ponemos nuestro foco: LA CUCHARA DE SAN LORENZO.
Nacía en la primavera de 2006 y desde
nuestro punto de vista se trata de un restaurante de indiscutible interés para
los amantes de la buena mesa, aunque pertenece a ese grupo de desapercibidos
para una gran mayoría de cordobeses. No es el primero que pasa por nuestro
blog-revista bajo esta circunstancia. Sin embargo, es una referencia habitual
de las principales guías gastronómicas, especialmente de la Michelín donde su
recomendación es constante desde hace ya unos cuantos años.
Gran parte del mérito para
alcanzar este reconocimiento se encuentra en el trabajo de sus propietarios,
los hermanos Francisco y Narciso López. Empezando por este último, decir que su
labor esta en la dirección de sala. Una dirección atenta y profesional.
Interesante estar atentos a sus consejos y especialmente al relato que hace de
las habituales sugerencias fuera de carta. El responsable de esta última es la otra pata de este dúo, Francisco López quien, desde la cocina, dirige la propuesta
gastronómica del restaurante. Tiempo atrás se formaba académicamente en nuestra
ciudad y adquiría experiencia en importantes restaurantes dentro y fuera de
Córdoba. Ya en su propio restaurante, diseña una carta que ha acabado consolidando.
Efectivamente, pocas variaciones en estos últimos años en una oferta basada en
el buen producto y los toques de modernidad en preparaciones tradicionales
españolas y también en algunas de corte más internacional.
Esta es la carta que podemos
encontrar actualmente en La Cuchara de San Lorenzo:
Aperitivos
- Anchoas del Cantábrico, con
tomate de temporada y aceite de oliva
- Salmorejo, con jamón ibérico y
huevo de codorniz
- Paté de Perdiz Escabechado, con
aceite de oliva virgen extra
- Carpaccio de Gambas, con
salmorejo de su propio coral y rabanito picante
- Nuestra Ensaladilla de Gambas
Ensaladas
- De Boquerones en Vinagre, con
pimientos asados y cebolleta
- De Foie y Jamón de Pato, con pera
y frutos secos
- De Queso de Cabra Gratinado, con
nueces, piñones, pistacho y miel de caña
- De Cogollos, con salmón ahumado y
langostinos
Entrantes Calientes
- Habitas Baby, con huevo y jamón
ibérico
- Flamenquín, con queso parmesano y
patatas fritas
- Croquetas de Ternera, con
ensaladita y alí-oli
- Berenjenas Orly, con miel de caña
- Patatas Cortijeras, con huevo,
pimientos, chorizo y jamón
- Parmentier de Boletus, con puré
de patatas, huevo a 63º C y queso parmesano
- Pisto con Huevo y patatas fritas
- Patatita Rellena, boloñesa y mahonesa picante
- Croqueta de Bacalao, con puré de
su potaje y chips de espinacas
Arroces
- Rissotto de Boletus, y setas de
temporada
- Arroz Negro, con tallarines de
calamar fino y tirabeques
Del Mar
- Corona de Rape, con arroz negro y
gambitas
- Bacalao Gratinado, con salsa
ligera de ali-oli y pisto
- Xipirones Rellenos, con arroz y
aceite de cebollino
Del Cerdo Ibérico
- Manitas Deshuesadas, rellenas de
foie y jamón ibérico
- Carrillada Estofada, con puré de
patatas
- Solomillo Ibérico Laminado, con pastel
de patata, bacón y verduritas
- Presa a la Parrilla, con pastel
de patata, bacón y verduritas
Del Buey
- Carpaccio, finas lonchas de
solomillo marinado y queso parmesano
- Steak Tartare, solomillo cortado
a cuchillo y macerado
- Solomillo a la Plancha, con
pastel de patata, bacón y verduritas
- 90 GR. De Hamburguesa, cebolla
caramelizada, foie y canónigos
Estofados
- Rabo de Toro, con patatas
pochadas
- Callos de Ternera, con patatas
fritas palillo
- Garbanzos con Manitas y Chorizo
Postres
- Couland, bizcocho de chocolate
fluido y helado de vainilla
- Torrija Caramelizada, con sopa de
coco y helado de canela
- Brownie de Xoco Blanco, con
helado de xoco
- Brownie de Xoco Negro, con helado
de vainilla
- Crème Brûlee, con arena de
avellana y peta zeta
Acudimos para cenar y lo hacemos
con reserva. Por experiencias anteriores, creemos que es lo más aconsejable –
si es fin de semana, festivo o época de mayor afluencia de turismo, no lo
dudéis –. Lo cierto es que durante la noche tanto el interior del local como la
terraza llegan a llenarse. Ocupamos una mesa precisamente en la terraza, opción
posible con la llegada del buen tiempo y que afortunadamente amplia el número
de mesas habitualmente disponible. Si accedéis al interior, comprobaréis que el
espacio es realmente reducido. También os daréis cuenta de que su aspecto se
aleja de la taberna típica. Predomina la decoración y el mobiliario en madera, alguna
zona de los muros en piedra y suelo de losa; líneas rectas y ligeros toques de
color donde destaca el detalle simpático en las lámparas con esas cucharas que
cuelgan de ellas. El local esta concebido para funcionar como restaurante puro,
aunque dispone de barra fundamentalmente utilizada para tomar algo mientras
esperas que preparen tu mesa.
Cesta de Pan en La Cuchara de San Lorenzo
Mesa en La Cuchara de San Lorenzo
Una vez sentados, vemos que
ésta se dispone de manera informal, casi a modo de gastrobar, con
pequeños manteles individuales, plato y bajoplato de aspecto moderno y
servilletas de papel negras con el logo del restaurante.
Y llegó el momento más importante
de la noche: de riguroso negro, Narciso López nos atiende y toma nota de
nuestra elección. Somos cuatro mayores y un niño, y nos decantamos por una
mezcla entre platos de la carta y las sugerencias de la jornada que previamente
nos ha comentado. Mencionar que desgraciadamente, se había acabado el
“Carpaccio de Gambas, con salmorejo de su propio coral y rabanito picante”, uno
de nuestros entrantes imprescindibles y que os recomendamos si tenéis
oportunidad. Dicho esto, pedimos tres entrantes calientes: la “Patatita
Rellena, boloñesa y mahonesa picante”,
picante pero suave, el “Parmentier de Boletus, con puré de patatas, huevo a 63º
C y queso parmesano” que se termina en mesa y unas “Alcachofas naturales
confitadas con jamón” que resultan muy jugosas y tiernas.
Para la elección de platos principales alcanzamos el equilibrio entre pescado y carne: un “Revuelto de foie de rape con patatas paja”, la “Corona de Rape, con arroz negro y gambitas”, un “Jarrete de cordero glaseado con puré de patatas” y el “Solomillo Ibérico Laminado, con pastel de patata, bacón y verduritas”, este último acompañado de salsa verde y puntos de mahonesa de pimientos rojos sobre el plato. Unas “Croquetas de ternera” serán la elección de nuestro joven acompañante. Todo resulta delicioso.
Para el postre pedimos “Torrija Caramelizada, con sopa de coco y helado de canela” – por partida doble – y la “Crème Brûlee, con arena de avellana y peta zeta”, ambos sensacionales. Destaca el toque imaginativo de los “peta zetas” que puedes sentir como explotan en tu boca. En conjunto, presentaciones cuidadas y modernas – algo que pueden sintetizar incluso en un plato infantil –, correctas ejecuciones y buen sabor.
Parmentier de Boletus de La Cuchara de San Lorenzo
Patatita Rellena de La Cuchara de San Lorenzo
Alcachofas Confitadas de La Cuchara de San Lorenzo
Para la elección de platos principales alcanzamos el equilibrio entre pescado y carne: un “Revuelto de foie de rape con patatas paja”, la “Corona de Rape, con arroz negro y gambitas”, un “Jarrete de cordero glaseado con puré de patatas” y el “Solomillo Ibérico Laminado, con pastel de patata, bacón y verduritas”, este último acompañado de salsa verde y puntos de mahonesa de pimientos rojos sobre el plato. Unas “Croquetas de ternera” serán la elección de nuestro joven acompañante. Todo resulta delicioso.
Revuelto de Foie de Rape de La Cuchara de San Lorenzo
Corona de Rape con Arroz Negro de La Cuchara de San Lorenzo
Jarrete de Cordero Glaseado de La Cuchara de San Lorenzo
Solomillo Ibérico Laminado de La Cuchara de San Lorenzo
Croquetas de ternera de La Cuchara de San Lorenzo
Para el postre pedimos “Torrija Caramelizada, con sopa de coco y helado de canela” – por partida doble – y la “Crème Brûlee, con arena de avellana y peta zeta”, ambos sensacionales. Destaca el toque imaginativo de los “peta zetas” que puedes sentir como explotan en tu boca. En conjunto, presentaciones cuidadas y modernas – algo que pueden sintetizar incluso en un plato infantil –, correctas ejecuciones y buen sabor.
Crème Brûlee de La Cuchara de San Lorenzo
Torrija Caramelizada de La Cuchara de San Lorenzo
Aunque satisfechos por la
elección, no podemos dejar de recomendaros, entre otros, platos de la carta
absolutamente fundamentales como las “Manitas Deshuesadas, rellenas de foie y
jamón ibérico” o el “Rabo de Toro, con patatas pochadas” que se suman al
“Carpaccio de Gambas” antes mencionado.
Dos cervezas, tres refrescos, una copa de vino tinto - Pago del Vicario - y cuatro cafés cortados completan una cuenta que ascendió a 128,5 euros. La media ronda los 25 o 30 euros por comensal – aumentaría algo más con una botella de vino –. Precisamente y aunque en esta visita no pedimos ninguna botella, no queremos dejar de mencionar la bodega: limitada en referencias pero bien escogida en cuanto a regiones y tipos, y con precios equilibrados.
Trufas y lenguas gentileza del restaurante
Para redondear la noche, el restaurante nos invita a unas trufas de chocolate y unas lenguas de anís. Un detalle que sirve para poner fin a una estupenda cena en la que comprobamos, una vez más, que el “rincón de los López” se consolida como una de las apuestas gastronómicas más seguras de Córdoba.
Incomodísimos los ruidos, gritos y demás que salen de la cocina. Todo se escucha en la sala comedor y es desagradable. Nada Sibarita.
ResponderEliminarBuenas comida pero el servicio fatal
ResponderEliminarNuestra experiencia ha sido agradable cuando hemos visitado el restaurante, tanto en sala como en terraza. Y la atención más que correcta. No podríamos decir lo contrario ya que esa ha sido nuestra experiencia real.
ResponderEliminarComo clientes siempre tenemos la opción de expresar nuestras quejas ante cualquier problema que advirtamos y si no nos sentimos satisfechos la opción es no volver.
En todos los ámbitos es posible que tener un día menos afortunado por lo que siempre es recomendable regresar a los establecimientos y comprobar si definitivamente es satisfactoria o no nuestra experiencia.
Y en cualquier caso, da igual lo que aquí digamos o en cualquier guía, revista especializada o medio de comunicación, ya que vuestra experiencia personal es lo más importante.